Cada vez vemos más noticias sobre los logros y promesas de la energía renovable, lo cual nos hace pensar que progresamos adecuadamente en materia de energía. Sin embargo, la falta de acceso a energía asequible no parece avanzar bastante en el Mundo. 1060 millones de personas todavía viven sin electricidad, evidenciando un problema grave y estructural que no está mejorando lo suficiente. Las Naciones Unidas tienen unos objetivos para el año 2030, pero no estamos haciendo los deberes.
Acceso energético universal: una necesidad para mejorar la vida de la humanidad
Todo progreso acaba dependiendo de tres factores: acceso a comida, acceso a recursos fundamentales y acceso a energía. La energía es central para casi todos los grandes desafíos y oportunidades del ser humano. Ya sea para el empleo, la seguridad, el cambio climático, la producción de alimentos o para aumentar los ingresos, el acceso universal a la energía es esencial.
Sin embargo, el avance en materia de energía sostenible no está a la altura de lo que se necesita para lograr su acceso universal. Si se desea lograr mejoras significativas, se necesitarán mayores niveles de financiación y políticas con compromisos más audaces, además de la buena disposición de los países para adoptar nuevas tecnologías en una escala mucho más amplia.
Por otro lado, el acceso a la energía ha sido motivo de conflictos políticos y bélicos durante toda la historia. Actualmente, es uno de los pilares de poder y crecimiento de una nación frente a muchos otros factores. Un país con acceso suficiente a energía, permite seguir progresando. La energía es el motor de la sociedad y la economía y por ello es necesario que la población tenga un acceso sencillo y barato a la misma.
Energía renovable; no es ningún secreto
Todo el mundo es consciente de la necesidad de seguir sustituyendo fuentes de energía basadas en la combustión por fuentes de energía limpia. Esta demanda social está siendo clave en la llamada transición energética. Y es que no podemos seguir fundamentando nuestra sociedad en la quema de cosas, como si fuésemos aún hombres cavernícolas. Ese método no puede tener más recorrido por dos razones:
- No va a haber suficientes cosas que quemar para toda la humanidad en el futuro.
- Quemar cosas para tener energía tiene efectos muy perjudiciales para la salud de las personas y del planeta Tierra.
La energía sostenible es una oportunidad que transforma la vida, la economía y el planeta. Las Naciones Unidas apoyan las iniciativas que aseguran el acceso universal a los servicios de energía modernos, mejoran el rendimiento energético y aumentan el uso de fuentes renovables.
Objetivos de la ONU
El avance en energía universal está siendo peligrosamente lento:
- El 85,3% de la población mundial tenía acceso a electricidad en 2014, lo cual supuso un aumento de tan solo 0,3% desde 2012. Eso significa que 1060 millones de personas todavía viven sin electricidad.
- El acceso a tecnologías y combustibles menos contaminantes para cocinar aumentó al 57,4% en 2014, poco más que el 56,5% registrado en 2012.
- La proporción de la energía renovable respecto al consumo final de energía aumentó ligeramente de 2012 a 2014, del 17,9% al 18,3%. La mayor parte de ese aumento correspondió a fuentes de energía como la hidroeléctrica, la solar y la eólica. Las dos últimas aún constituyen una proporción relativamente menor del consumo, a pesar de su rápido crecimiento en los últimos años. El desafío consiste en aumentar el uso de energía renovable en sectores como el de la calefacción y el transporte, que en conjunto representan el 80% del consumo energético mundial.
- De 2012 a 2014, tres cuartas partes de los 20 países que más energía consumían en el mundo habían reducido su nivel de intensidad energética, es decir, la proporción de energía utilizada por unidad de PIB. Esa reducción se debió principalmente a una mayor eficiencia en los sectores de la industria y el transporte. Sin embargo, ese avance aún no basta para cumplir la meta de duplicar la tasa mundial de mejora de la eficiencia energética.
Y por ello las Naciones Unidas establecen 5 objetivos que debería cumplir la humanidad antes del año 2030:
- Garantizar el acceso universal a servicios energéticos asequibles, fiables y modernos
- Aumentar considerablemente la proporción de energía renovable en el conjunto de fuentes energéticas.
- Duplicar la tasa mundial de mejora de la eficiencia energética.
- Aumentar la cooperación internacional para facilitar el acceso a la investigación y la tecnología relativas a la energía limpia, incluidas las fuentes renovables, la eficiencia energética y las tecnologías avanzadas y menos contaminantes de combustibles fósiles, y promover la inversión en infraestructura energética y tecnologías limpias.
- Ampliar la infraestructura y mejorar la tecnología para prestar servicios energéticos modernos y sostenibles para todos en los países en desarrollo, en particular los países menos adelantados, los pequeños Estados insulares en desarrollo y los países en desarrollo sin litoral, en consonancia con sus respectivos programas de apoyo.
Conclusión
Existen tres retos diferentes pero complementarios:
1 Sustitución de combustibles fósiles por energías limpias
La combinación de energía solar, eólica, nuclear y otras, permitirá dar un gran paso a la humanidad. Toda la energía disponible en el planeta está a nuestro alcance. Los esfuerzos que hagamos (inversión) tendrá una enorme recompensa a corto plazo.
2 Acceso a energía básica en países menos desarrollados
Debemos empoderar energéticamente a países que tienen carestía enegética. Como ya explicamos en este artículo, su mejora tendrá retorno en los países más desarrollados.
3 Investigación y desarrollo de nuevas energías
El deseo de la fusión nuclear sigue siendo un sueño del que aún no hemos despertado. El trabajo del ITER está siendo muy positivo, pero aun así muy lento. Nuevos estudios apuntan que la “compactación” de un reactor de fusión pueden resolver los retos técnicos. Apostemos por ello.
2 comentarios en “El acceso a la energía en el mundo está progresando muy lentamente”