Desde el pasado mes de noviembre España cuenta con el primer calendario común de vacunación para toda la vida, que recoge todas las vacunas recomendadas para todas las edades. Hasta el momento no todas las comunidades autónomas contaban con el mismo calendario vacunacional, lo que generaba una desigualdad en la prevención de las enfermedades y en la oferta de salud entre la población. Pero a partir de ahora debe comenzar a aplicarse este calendario consensuado entre todas las comunidades autónomas en todo el territorio nacional. Las novedades incluidas en este calendario se centran principalmente en la recomendación de vacunaciones en mujeres embarazadas, el rescate de vacunaciones pendientes en adolescentes entre 15-18 años y en adultos a partir de los 19 años, y en algunas recomendaciones de vacunación a partir de los 65 años.
Mediante la infografía que publicamos hoy y con este artículo queremos recordaros cuáles son las vacunas que TODOS debemos ponernos, frente a qué enfermedades nos protegen y las dosis recomendadas de cada una de ellas. Además de las vacunas incluidas en este calendario, el Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (CAV-AEP) realiza algunas recomendaciones que deberían ser también incluidas en dicho calendario y que os contamos también aquí.
¿Cuáles son las vacunas incluidas en el calendario vacunacional?
Actualmente están incluidas 10 vacunas que protegen frente a 14 enfermedades infecciosas, tanto bacterianas como víricas. Además de éstas, el CAV-AEP recomienda incluir en dicho calendario tres vacunas más: la vacuna frente a meningitis B, la vacuna combinada tetravalente frente a meningitis ACWY y la vacuna frente a rotavirus responsables de diarreas en los bebés lactantes.
El CAV-AEP también sugiere la administración de la vacuna frente a la tosferina en adolescentes y la del Virus del Papiloma Humano (VPH) en varones.
¿Qué vacuna, cuándo y contra qué?
Los calendarios vacunacionales han ido sufriendo muchos cambios a lo largo del tiempo, por lo que muy probablemente las vacunas que cada uno de nosotros recibimos cuando éramos pequeños serán algo diferentes a las han recibido o recibirán nuestros hijos. Por un lado, han ido modificándose en cuanto al contenido, pasando de la utilización de los microorganismos enteros atenuados o inactivados al empleo sólo de pequeños fragmentos o incluso a toxinas producidas por ellos. También se ha modificado en muchos casos la forma de administración combinada con otras vacunas, como por ejemplo en el caso de la tetravalente DTPa-VPI, que protege frente a difteria, tétanos, tosferina y poliomielitis, la cual evolucionó a pentavalente tras incluir Haemophilus influenzae tipo b (DTPa-VPI-Hib), y finalmente la hexavalente tras la inclusión de la hepatitis B (DTPa-VPI-Hib-HB). Además, los esquemas de pautas también han ido cambiando según los cambios epidemiológicos que se han ido observando. Aquí os explicamos cómo quedaría el calendario vacunacional actualmente, así como algunas de las recomendaciones de la AEP a tener en cuenta.
Difteria-Tétanos-Pertusis acelular (DTPa/dTpa/dT)
Se trata de una vacuna combinada trivalente que protege frente a la difteria (D), producida por Corynebacterium diphtheriae, el tétanos (T), producido por Clostridium tetani y la tosferina (P), producida por Bordetella pertussis. La carga antigénica de ésta última se denomina Pertusis acelular porque se prepara con fracciones no tóxicas de Bordetella pertussis, lo que hace que los posibles efectos secundarios sean mucho menos frecuentes. Anteriormente se empleaba la bacteria entera inactivada (DTPe), pero en la actualidad dicha variante ya no se utiliza en España.
Existen varias variantes de esta vacuna recomendadas en diferentes edades. La variante DTPa, que presenta una carga antigénica completa de sus tres componentes, debe administrarse a los 2,4 y 11 meses. La administración de estas tres dosis es mediante la vacuna hexavalente, junto con la vacuna de la hepatitis B, la poliomielitis y la de Haemophilus influenzae tipo b. Sólo si se ha seguido esta pauta de 3 dosis, la cuarta dosis de recuerdo a los 6 años es sustituida por la dTpa, la cual presenta una menor carga antigénica del toxoide diftérico y pertusis. Finalmente, se recomienda una quinta dosis con dTpa en la adolescencia entre los 12 y los 18 años. Esta quinta dosis podría administrarse en cualquier momento a lo largo de la vida adulta. Por razones económicas en algunos casos esta quinta dosis ha sido sustituida por la dT, que sólo contiene la toxina diftérica (a baja dosis) y la tetánica.
La dTpa de baja dosis se recomienda también en mujeres embarazadas entre la semana 27-36 del embarazo y la dT en mayores de 65 años.
Hepatitis B (HB)
La vacuna frente a la hepatitis B es una vacuna inactivada y no contiene material genético del virus, por lo que no dispone de capacidad para contagiar ni para producir la enfermedad. La vacunación frente a la hepatitis B comenzó a realizarse en España entre 1991 y 1996 en adolescentes, pero actualmente en todas las comunidades autónomas se vacuna durante el primer año de vida. Las pautas recomendadas son de una dosis monovalente al nacer, y posteriormente 3 dosis, a los 2,4 y 11 meses, incluida dentro de la hexavalente.
Los adolescentes que no hayan sido vacunados previamente, deberían recibir tres dosis de la vacuna entre los 15-18 años, siguiendo el esquema de 0,1 y 6 meses.
Poliomielitis (VPI)
La poliomielitis está producida por tres serotipos del virus de la polio (VP1, VP2 y VP3) y es muy contagioso, transmitiéndose por vía fecal, oral y respiratoria. También puede transmitirse a través de la placenta y a través de aguas residuales. Esta enfermedad no tiene tratamiento, por lo que la vacuna es el principal mecanismo para su control. La vacuna consiste en un preparado de los virus inactivados (VPI), que se incluye en la vacuna hexavalente, por lo que su pauta de administración es a los 2, 4 y 11 meses. A los 6 años se administra una dosis de recuerdo junto con la DTPa. Con estas 4 dosis se consigue una protección del 100%.
Haemophilus influenzae b (Hib)
Haemophilus influenzae tipo b (Hib) es una bacteria que puede producir neumonía (si afecta al pulmón), epiglotis (si afecta a la laringe) y meningitis (si afecta a las meninges, que son las membranas que envuelven el cerebro y la médula espinal). Afecta principalmente a niños menores de 5 años. Hib puede colonizar la garganta de individuos sanos sin producir la enfermedad, lo que se conoce como individuos portadores, por lo que esta vacuna no sólo previene la enfermedad, sino que también reduce las probabilidades de contagio al evitar dicha colonización.
La vacuna contra el Hib es una vacuna inactivada que forma parte de la hexavalente, por lo que su pauta es a los 2, 4 y 11 meses. La vacuna frente al Hib también está comercializada como vacuna individual, pero su uso está restringido a casos muy especiales.
Neumococo (NVC)
Neumococo o Streptococcus pneumoniae causa dos formas de enfermedad diferentes: enfermedad invasora, como meningitis, bacteriemia y sepsis (estas últimas caracterizadas por la presencia de bacterias en el torrente circulatorio), o enfermedad no invasora como neumonía, otitis media y sinusitis. La complejidad del tratamiento y prevención de las enfermedades producidas por neumococo se debe a la existencia de más de 95 cepas diferentes (denominados serotipos) que se diferencian en la composición de su cápsula protectora. Al igual que ocurre con H. influenzae, neumococo coloniza la nasofaringe en los primeros meses de vida y constituye el único reservorio de la bacteria contribuyendo a la diseminación comunitaria e intrafamiliar del microorganismo (entre hermanos, en las guarderías, a ancianos que conviven en la misma casa).
La introducción de la vacuna neumocócica conjugada heptavalente (VNC7) (frente a 7 serotipos diferentes) en el año 2016 contribuyó a una disminución de las infecciones producidas por los serotipos incluidos, sin embargo, supuso un incremento de las infecciones producidas por los serotipos no contenidos en esta vacuna. Eso condujo a la aparición de nuevas vacunas conjugadas de valencia ampliada VNC10 (10-valente, frente a 10 serotipos) y la VNC13 (13-valente, frente a 13 serotipos. Actualmente la VNC13 es la que proporciona la mejor cobertura frente a los serotipos circulantes en nuestro país.
La pauta recomendada actualmente en el calendario vacunacional es la de dos dosis a los 2 y 4 meses de vida, y una dosis de recuerdo a los 11 meses (igual que la pauta de la hexavalente). En el caso de que no se haya seguido esta pauta, las dosis dependerán de la edad del niño.
- Menores de 1 año: se administrarán 2 dosis el primer año de vida y 1 dosis durante el segundo año de vida siguiendo el siguiente esquema: Dosis 1 à 1 mes à Dosis 2 à ≥2 meses à Dosis 3
- Entre 1-5 años: se administrarán 2 dosis con un intervalo de 2 meses de diferencia.
- Mayores de 5 años: se administrará una única dosis de la VNC13.
Sarampión-Rubeola-Parotiditis (SRP)
La vacuna triple vírica se introdujo en España en 1981, y está compuesta por los virus atenuados del sarampión, la rubeola y la parotiditis.
En la actualidad el sarampión produce un fallecimiento por cada 3000 casos y una encefalitis cada 1000 casos, pudiendo llegar a dejar secuelas neurológicas. En 2011 se produjo un repunte de la enfermedad en toda Europa, contabilizándose unos 3500 casos sólo en España. A pesar de que a partir de 2012 la incidencia ha ido disminuyendo progresivamente, actualmente existen focos epidémicos importantes no controlados en Rumanía, Italia, Grecia y Alemania.
Por su parte el virus de la rubeola produce la aparición de manchas rosadas en la piel, acompañadas de fiebre y aumento de tamaño de los ganglios del cuello. Si se padece durante un embarazo puede dar lugar a anomalías en el desarrollo del embrión.
La parotiditis o popularmente conocida como paperas, es una enfermedad típica de la edad escolar (5-14 años), y se caracteriza por una inflamación de las glándulas salivares causada por la infección del virus.
La triple vírica SRP está incluida en el calendario de vacunación, con una primera dosis a los 12 meses y la segunda a los 2-3 años de edad, preferentemente a los 2 años. La segunda dosis puede aplicarse en forma de tetravírica junto con la vacuna de la varicela (SRPV). En pacientes susceptibles fuera de las edades anteriores, se recomienda la vacunación con 2 dosis de SRP con un intervalo de, al menos, un mes entre ellas.
Varicela (Var)
La varicela se produce debido a la infección por el virus varicela-zóster (VVZ). El virus puede permanecer latente en los ganglios y reactivarse a cualquier edad. En ausencia de vacunación entre el 90-95 % de los niños padecen la enfermedad antes de los 12 años, que se caracteriza por un exantema típico que permite el diagnóstico. Si tiene lugar durante el embarazo, podrían producirse malformaciones congénitas o varicela del recién nacido.
La vacunación frente a la varicela en España se inició en 1998, y la pauta recomendada es de 2 dosis, la primera entre los 12-15 meses, mediante la vacuna monocomponente, y la segunda entre los 3-4 años de edad mediante la tetravalente SRPV. Se aconseja un rescate a partir de los 12 años si no se ha recibido la vacuna previamente.
Virus del papiloma humano (VPH)
El virus del papiloma humano causa lesiones neoplásicas anogenitales en el hombre y en la mujer, siendo el cáncer de cérvix el más habitual. La transmisión tiene lugar por contacto sexual, por lo que se recomienda la vacunación antes de las primeras relaciones sexuales. En el calendario vacunacional sólo está incluida la vacunación en niñas de 12 años, aunque el CAV-AEP recomienda también su uso en varones ya que el VPH es responsable también de verrugas genitales en hombres de 9 a 26 años y puede causar cánceres anales.
Se dispone de tres variantes que incluyen diferentes serotipos: la bivalente (VPH2), la tetravalente VPH4 y la nonavalente VPH9, aunque las de uso preferente son la VPH4 y la VPH2. La pauta recomendada de 2 dosis a los 12 años se transforma en 3 dosis si la vacunación se realiza después de los 15 años.

Gripe
Los virus que producen la gripe pertenecen a los géneros Influenzavirus A, Influenzavirus B e Influenzavirus C. Estos virus presentan en la superficie de su membrana unas proteínas denominadas hemaglutinina (HA) y neuraminidasa (NA) que actúan como antígenos ante nuestro sistema inmunológico permitiendo la producción de anticuerpos. La razón por la cual la vacunación frente a la gripe debe hacerse anualmente es porque el virus modifica constantemente estas proteínas de superficie, impidiendo que los anticuerpos generados el año anterior reconozcan esta nueva versión del virus. Así, cada año, las vacunas de la gripe se preparan con los virus más comunes que se estima para la siguiente temporada.
El virus se contagia de persona a persona a través de secreciones respiratorias o a través de las manos contaminadas, siendo los niños el principal vehículo de transmisión de la enfermedad. Es por ello que la vacuna frente a la gripe está recomendada en todos los grupos de edad con una dosis anual en otoño (de octubre a diciembre). En el caso de los niños de entre 6 y 8 meses se recomienda 2 dosis (separadas de 4 semanas) si no han sido vacunados nunca o sólo han sido vacunados en una ocasión.
Meningitis (MenC, MenACWY, MenB)
El meningococo o Neisseria meningitidis es capaz de penetrar en el torrente circulatorio y acceder al sistema nervioso central (SNC) causando meningitis. En la actualidad existen 12 serotipos diferentes, en función de la composición de su cápsula, siendo los que se aíslan con mayor frecuencia en Europa los serotipos B, W, C e Y.
En España, la primera vacuna en incluirse en el calendario vacunacional fue la de la meningitis C, lo que ha llevado a una reducción de la incidencia de este serotipo, emergiendo otros serotipos que eran menos frecuentes (W, Y). La pauta de MenC establecida actualmente es de 3 dosis: una a los 4 meses de vida y 2 dosis de recuerdo, una a los 12 meses y otra a los 12 años de edad. Si no se hubiera recibido esta pauta, se recomienda administrar una única dosis entre los 15 y los 18 años.
Sin embargo, el CAV-AEP recomienda que la segunda y tercera dosis (12 meses y 12 años) sea sustituida por la vacuna tetravalente MenACWY debido al incremento en la incidencia de las infecciones meningocócicas por los serotipos W e Y. Además, aconseja una dosis de rescate antes de los 19 años en aquellos jóvenes que no hayan recibido este esquema de administración.
Este comité también recomienda la vacunación frente a la meningitis B, que no está incluida actualmente en el calendario vacunacional y además no está financiada por el Sistema Nacional de Salud. Las dosis recomendadas de MenB son 3: a los 3 meses, 5 meses y a partir de los 12 meses.

Rotavirus (RV)
El rotavirus es la causa más frecuente de gastroenteritis aguda (GEA) en niños menores de 2 años, que cursa con diarreas y vómitos. En la actualidad existen 2 vacunas frente al rotavirus, la monovalente y la pentavalente, ambas atenuadas y de administración oral, que han demostrado ser seguras y eficaces frente a la enfermedad y que no interfieren con las vacunas del calendario vigente. Esta vacuna no se encuentra incluida en el calendario financiado, pero el CAV-EAP recomienda su inclusión con una pauta de 2 dosis (2 y 3 meses) para la monovalente, y de 3 dosis (2, 3 y 4 meses) para la pentavalente.
Esperamos que este artículo haya servido para aportar un poco de luz en relación al cambiante calendario de vacunación y hayáis podido detectar aquellas vacunas que os faltan por recibir. Si ha sido así, el siguiente paso será poneros en contacto con vuestro médico para que os recomiende de manera personalizada como podéis proteger vuestra salud y la de los vuestros. Recordad, ¡cuando te vacunas, nos vacunamos TODOS!
¡Que las vacunas te acompañen!
Bibliografía:
https://www.who.int/topics/vaccines/es/
Un comentario en “¿Cuándo debemos vacunar a nuestros hijos?”